I AM NOT A ROBOT (MBC 2017)

¡Hola a todos!

Ya estoy aquí otra vez, una vez que ya he publicado los megapost de MOON LOVERS: SCARLET HEART RYEO que tanto trabajito me dieron, aquí vuelvo intentando seguir con la tónica que llevaba los últimos meses antes de este último parón, de ir publicando más asiduamente sobre todo reseñas no tan largas (que no cortas jajaja) de los dramas que he ido viendo en estos días de ausencia, la verdad es que la lista no ha aumentado demasiado porque apenas he contado con tiempo para ellos (a pesar de ser lo único que veo…).

      Hoy os traigo I AM NOT A ROBOT, uno de esos dramas de los que he oído (y sigo oyendo) hablar tantísimas maravillas, que gusta tanto (la historia, el protagonista y la pareja) a pesar de sus bajos ratings en Corea… nuevamente los gustos internacionales no coinciden con los de los coreanos… a veces no hay quién los entienda…, así que no pude sino, más por curiosidad que por atracción (no conocía a los protagonistas y la historia no me parecía mejor que la de algunos de mis tantos dramas pendientes…) lanzarme a verlo al poco de haber finalizado, cosa que ya sabéis que no suelo hacer.     La verdad es que mis expectativas no eran demasiado altas a pesar de que muchas veces mis gustos y preferencias ¡cosa rara! Coinciden con la gran mayoría, pero también ha habido ocasiones en las que después de haber oído halagos por doquier sobre determinado drama, una vez me he puesto a verlo, me han decepcionado bastante, no es que no me hayan gustado (es rarísimo que un drama no tenga algo que me guste… sólo he abandonado uno… y precisamente de los famosísimos Playful Kiss… venga, ya lo he dicho jajaja…) pero no he entendido esa pasión que habían levantado más allá de la aparición del guapo oppa de turno (The Legend of the blue sea, Heirs, Strong Woman Do Bong Soon…), así que suelo ir con las expectativas bastante bajas en estos casos, pero mira por dónde, desde el primer momento este drama las superó con creces y me conquistó de la misma manera que a todas esas fans entusiastas.

        I  AM NOT A ROBOT no será el drama del año a pesar de que muchos ya lo tachen como uno de sus favoritos (el adjetivo “favorito” en el mundo de los dramas es algo tan difícil de controlar, de mantener, es algo tan superficial… jajaja como se suele decir, tanto con los oppas como con los dramas el mundo “doramaniatico” es un pozo de infidelidades sin fin jajaja hoy amo a uno, mañana a otro… Aunque yo suelo ser muy constante y clara en eso de “mis predilectos”, aumenta la lista pero no sustituyo… eso si,  en la interminable lista de favoritos los dramas suben y bajan que da gusto…), no será un DRAMA en mayúsculas en su conjunto, de hecho lo definiría como una especie de bonito cuentecito desarrollado en 32 capítulos de media hora, vamos, 16 capítulos… con un trasfondo de mensaje escondido mucho más profundo de lo que pueda parecer, pero como digo, sin ser una producción de esas que independientemente de gustos rebose calidad por todos los lados (lo que no significa que sea malo para nada), tiene lo que precisamente en ocasiones a éstas les falta, esa magia sencilla que te atrapa, ni siquiera, repito, necesitan ser un drama excepcional porque tienen la honestidad de no aspirar a ello, pero por el contrario saben llegarte de una manera asombrosa, tiene ese “algo” que consiguen hacer que te encanten, que los vivas y que te sumerjan en un mar de emociones mientras los estás viendo. Realmente este tipo de dramas es el que me enamoró desde que empecé en este mundo, no siempre me apetece ver las mejores historias y ambientaciones, a veces lo único que deseo cuando estoy delante de la televisión es sentir, dejarme invadir por diferentes sentimientos, reír, llorar (en este caso sobre todo llorar jajaja), tener ese impulso de querer atravesar la pantalla y abrazar al protagonista, de suspirar por lo que dicen, cómo lo dicen o lo que hacen escena si y escena no… cosa que antes de descubrirlos ya ni siquiera recordaba y que a día de hoy no logro encontrar en otro tipo de producciones que a pesar de lo que despiertan en muchos, a mi me dejan helada y no consiguen transmitirte absolutamente nada, no consigo ni siquiera encontrar un punto de conexión con ellas, lo que no significa que sean mejores ni peores, simplemente algo a una persona en concreto le llega… y a otra no… igual que les puede pasar a otros con estos dramas, para eso existe la variedad, para que cada uno elija lo que más le guste.

      La historia de I AM NOT A ROBOT como ya anticipé, aunque es bastante simple a la vez da mucho juego, hoy os la cuento por encima porque no he encontrado ningún tráiler subtitulado… sólo teasers como este que os pongo a continuación que no revelan demasiado…

    Este drama podréis disfrutarlo también doblado en español latino, os dejo a continuación su trailer:

Kim Min Kyu (Yoo Seung Ho) es un multimillonario que sufre alergia a las personas, si, a las personas, pero una alergia que le provoca prácticamente la muerte con el simple roce de cualquier parte del cuerpo, por lo que vive en una gigantesca mansión desde hace 15 años apartado del mundo y solo teniendo contacto (a la distancia) con los ejecutivos de su empresa, su secretario… y poco más… no tiene amigos, no confía en nadie y por supuesto no ha revelado a nadie más que a su médico el mal que sufre, por lo que para todos es un ser de lo más excéntrico e insoportable, Min Kyu lo único que hace en su tiempo libre es atesorar cantidad de artilugios y piezas de colección que guarda con esmero en esa gigantesca jaula de cristal, no sabe lo que es una caricia, un beso, nada… el pobre lleva una vida tan solitaria y triste que nada más empezar ya te encoge el corazón al ver lo solo que está, él aparenta ser feliz en esa burbuja pero su existencia es de lo más vacía, triste… e incluso yo diría que patética, patética al punto de tener a su robot de limpieza como único amigo al que llega a celebrarle una fiesta por su cumpleaños (el día que lo compró…) o de alucinar viendo como se besan en películas en blanco y negro y en dramas (pues no es el mejor ejemplo para esto, la verdad jajaja) y emocionado intentando replicarlos él solo con la almohada…

      Pero un día su monótona y solitaria vida cambia cuando un grupo de científicos (a los que su padre financiaba antes de morir) encabezado por Hong Baek Gyun (Uhm Ki Joon) le ofrecen la posibilidad de adquirir un robot con forma humana, más concretamente con la cara y el cuerpo de una guapa y joven mujer (hecha a imagen de la exnovia del inventor…), un robot totalmente real… después del primer momento de asombro por lo que este robot puede llegar a hacer, decide, antes de invertir en su perfeccionamiento, llevárselo a casa para “enseñarle” y probarlo… todo va sobre la marcha hasta que por cosas que suceden, el robot sufre la avería de una pieza que deben de sustituir y que, cómo no, va a tardar un tiempo en llegar, así que ante la mala perspectiva de perder a semejante cliente (están arruinados…) y desconociendo la enfermedad que sufre éste, Kim Joon decide ir a buscar a su exnovia Jo Ji Ah (Chae Soo Bin), que como digo es la modelo del robot para que durante un par de días (que lógicamente se alargan…) se haga pasar, eso sí, totalmente controlada por ellos, por el robot AJI3.                La chica, que está falta de dinero y que acaba de recibir un últimatum de su hermano para que le devuelva todo el capital prestado que invierte una y otra vez en cantidad de inventos aparentemente inservibles que solo le traen la ruina, acepta el trabajo, pero cuál es su sorpresa cuando al llegar a la mansión se da cuenta de que su nuevo “amo” es el guapo, desagradable y prepotente ricachón con el que no para de tener varios encontronazos a raíz de un problema que tuvieron a la hora de comprar una de esas piezas que él colecciona… ¿Qué pasará con su alergia? Esa es más o menos la premisa, pero no os quiero estropear demasiado la historia, aunque es bastante previsible… a partir de ahí se suceden cantidad de escenas entre divertidas que te tienen con la sonrisilla en la boca (pero no desternillantes…) y sobre todo con momentos que te hacen soltar unos lagrimones de cuidado…

      Que yo soy muy llorona lo sabéis… que prácticamente en el 99% de los dramas siempre hay algo que consigue arrancarme una lágrima, también, porque lo digo continuamente…  pero es que con este drama no encontraba escenas de esas de “¡Dame un pañuelo!!” no… en este eran de las de “¡Saca la barca que nos ahogamos!” porque poco más e inundamos el salón… había momentos en que yo pensaba, “Pili, estás pasando por una época en la que estás un poco más sensible y te está tocando ésto demasiado porque no es normal jajaja”… así que con disimulo, echaba la vista hacia mi madre que estaba en el otro lado y de pronto veía que ella estaba igual jajaja y dije, «bueno… por lo menos no soy yo sola», lo que pasa que el tener a mi madre de ejemplo tampoco es demasiado válido porque también es otra llorona… pero definitivamente el complejo de magdalena aguachinada que me cargaba esos dos o tres días que nos duró el drama (¡voló!) se me pasó cuando leí (y leo) constantemente comentarios de gente apuntando lo muchísimo que han llorado con él… (con que veáis los comentarios en youtube debajo de algunas de las escenas claves os podéis hacer una idea… jajaja) y esto no es porque sea un tragedión (aunque para el chico lo es…), no es de esos de muertes, injusticias tan propios de los sageuks que siempre nos arrancan lagrimones, no, estas lágrimas vienen generadas, como dije al empezar el post, por un encadenamiento de escenas y de diálogos de lo más conmovedores y sobre todo casi podría asegurar que todos surgen de la interpretación de Yoo Seung Ho que te encoge una y otra vez el corazón… ¿Cómo es posible que en todo este tiempo viendo dramas nunca hubiera visto a este chico con lo mucho que ha trabajado??? ¡Qué maravilla de descubrimiento! Otro actorazo a añadir a mi lista de favoritos (¿Veis como lo que decía yo de la lista es verdad?…jajaja), dio la casualidad que justamente en el drama anterior a este «ARANG AND THE MAGISTRATE» de Lee Joon Gi (¡Hombre! Cuanto tiempo sin verte por aquí oppa… jajaja) del que espero pronto hablaros, Yoo Seung Ho interpretaba un papel que aunque era crucial en el drama (El emperador Jade) y que me agradaba, tampoco requería de grandes dotes actorales ni destacaba demasiado… así que cuando empecé con la del robot nada más terminar Arang recuerdo que me preguntaba… ¿este es el emperador?? ¿Es o no es? (El look era totalmente diferente y el drama ya tiene unos añitos…) Al final, aún segura de que lo era, lo busqué y si, casualidad (igual de casual que un amigo por su cuenta me haya descargado “Ruler: Master of the mask”, un sageuk por el que en principio nunca me hubiera interesado y que ¡adivinad! ¡Protagoniza él!!!! Ni a posta sucede…) y la verdad me sorprendió descubrir que ha trabajado tanto y que yo no sabía de su existencia… (Aunque ahora resulta que este actor gusta mucho en general, tanto por su trabajo como por su atractivo … ¿Dónde estaba que yo no lo había visto?).     A lo que iba, el gran mérito de que estas escenas te calen así es la forma en la que este chico expresa toda esa cantidad de sentimientos, no sólo por la cara que pone ni por los ojitos de cordero degollado, sino por cómo actúa… (tiene diálogos sencillos pero muy bonitos y efectivos), por eso a pesar de que como digo I AM NOT A ROBOT no sea un drama de esos inolvidables o que pase a la historia (a saber…) para mí tiene al menos dos escenas que si lo son y que son justamente las que causaron las grandes inundaciones en casa (aunque hay cantidad de este tipo porque ¡madre mía qué forma de sufrir la de este chico!… ¡menudo grifo! Sobra decir cuánto me gusta eso ¿verdad? jajaja).

     La primera escena es cuando resetea al supuesto robot para que olvide todo después de decirle cuánto la ama (muy bien ella también…) y la otra más adelante cuando descubre la verdad y le reclama a Jo Ji Ah por haberse burlado todo el tiempo de él… ¡madre mía que escenotas!! se pasa prácticamente 7 minutos él solo hablando y llorando de una manera que de verdad si hubiera tenido la barca hubiera cruzado el salón solo para meterme en la televisión y abrazarlo… sientes absolutamente todo lo que se supone que él está sintiendo… Tanto así que no me resisto a ponerlas (aunque no las voy a ver porque estoy en el cyber y no quiero hacer el ridículo por si empieza a gotear el grifo otra vez jajaja)

   

     En la primera transmite un amor y un dolor tan grande que sólo piensas “Yo quiero que me quieran así…”… y en la segunda una rabia acompañada nuevamente de un dolor y una vergüenza… sientes lo patético y ridículo que se siente por haber llegado a enamorarse de “una cosa”, porque esa es otra… durante toda la primera parte del drama lo mal que lo pasa (¡No llores oppa!!!!) cuando descubre avergonzado que está enamorado de un robot, cuando comprende que su enfermedad no es tanto física como psicológica y que gracias a esa máquina en la que por fin confía está prácticamente curado… la primera vez que ella le salva la vida (de no estar hubiera muerto ahogado) y se sorprende y emociona con la simple palmadita y caricia en la espalda… cuando se besan por primera vez…  cuando se queda con ella ya no como robot sino como la que piensa que es la modelo de éste y le cuenta entusiasmado todo lo que esa máquina le hizo sentir y Jo Ji está ahí escuchando todas las maravillas que dice de ella, la forma como la ama… es que hay taaaantas escenas que al menos a mí, solo por ellas, me compensa todo lo demás… aunque si lo pienso, este es un drama en el que no hay prácticamente nada que compensar porque casi podría decir que todo me gusta… me gusta mucho ella, si, lo habéis oído bien, no sé qué pasa pero llevo ya bastantes dramas en los que la protagonista me gusta!! ¡Hasta yo ando sorprendida!! O al menos no me disgusta (de los últimos la única que se me hizo más pesada es la de Black pero también puedo excusarla por el sambenito que tiene encima…), pero Chae Soo Bin  me ha gustado mucho, ella como actriz, a la cual, creo, tampoco conocía lo hace francamente bien (especialmente cuando finge ser un robot…) y le sabe dar buena replica a Seung Ho, aunque muchas veces quede por debajo de él (pero no tanto por su culpa sino porque el peso dramático recae en él) y el personaje Jo Ji Ah también, una chica que aunque tiene su propio mundo lleno de inventos y la cabeza llena de pajaritos no es de las insoportables, para nada (aunque las primeras escenas me previnieron para lo peor…jajaja), además que según avanza el drama, según va descubriendo al verdadero Min Kyu, primero siente lástima pero después se va enamorando, vas viendo cuánto y qué bien lo quiere, después el arrepentimiento que siente de haberlo engañado y de haber puesto su vida en peligro de esa manera, ves como va evolucionando y sobre todo es que hacen una pareja muy bonita y muy mona (por cierto… ¡vaya “besito” que se dan en la cocina!… no es que sea lo más de lo más pero para los que nos suelen ofrecer en los dramas pues es bastante reseñable jajaja… y en el making off ya ni os cuento… ¿Por qué nos los editan siempre?? 

     Y como suelo hacer, aquí os dejo un vídeo musical con escenas de la parejita acompañadas por dos de las canciones de la OST del drama, que aunque tampoco pasarán a la historia, la verdad es que no suenan nada mal y hacen que, nada más escuchar unas notas, me transporten a algunos de sus momentos:

       Los secundarios encabezados por Uhm Ki Joon como Hong Baek Gyun (¡qué gran actor es también! Y vaya cambio de registro después de acabar de verlo en DEFENDANT… otro que tengo pendiente de reseñar y que me pareció buenísimo….) están muy bien en su papel, caen simpáticos, no estorban para nada… ese Baek Gyun intentando recuperar a su exnovia que no sabe por qué lo dejó, pero que al ver como ambos protagonistas se quieren, cómo no, se quita del medio… los otros dos compañeros intentando conquistar a la amiga de Jo Ji… pero a mi lo que más me gustó fue el que nos mostraran cómo se va forjando la amistad entre ellos y el solitario Min Kyu, muy bonito a la vez que simple (verlos jugando al “1,2,3, chocolate ingles»…!, celebrando el cumpleaños, compartiendo una comida, cosas que el chico ni siquiera recuerda…), o como se van haciendo una familia hasta el punto de renunciar a todo por él… y bueno, la trama con el extranjero que quiere apoderarse del robot, pues es lo de menos, al igual que lo del primer amor y el amigo del protagonista que aunque son importantes en la trama se quedan opacados por todo lo demás… Sucede lo mismo con todo lo que ocurre en los últimos capítulos en los que ellos ya están felices juntos, pues me pareció un poco de relleno, de cerrar tramas abiertas y reparar daños, por supuesto con un final muy feliz para todos pero que repito, como la pareja es tan mona pues se lleva muy bien aunque no aporte demasiado… además que después de tanto sufrimiento se agradece, y mucho, ver al pobre protagonista ser feliz rodeado de gente que le quiere.

     Y diréis ¿no decías que este cuentecito tenía un trasfondo más profundo de lo que parecía, un mensaje? Pues efectivamente si lo tiene, eso si, como muy bien suelen hacer en muchos dramas está muy bien camuflado, tanto que muchas veces, sobre todo la gente joven que los ve no llega a entender, ni siquiera a veces a notarlos, ya lo comenté una vez pero lo vuelvo a hacer, cuando muchas chicas se quedan con el divertidísimo ¡Oppaaaaaa!! De Yo Na en Kill me Heal me y catalogan el drama como comedia me pone malas… es una historia con unos golpes divertidísimos de la mano de esa personalidad y de la de Perry Park ¡pero por favor!! No puedes quedarte con esa idea tan superficial, ese drama esconde un tragedión de narices magistralmente tratado, de allí que me atrevería a decir que es de los muy pocos ¿o único? que al menos yo (… aunque seguro los hay…) pero no he oído ni un comentario negativo sobre él (excepto los referidos a los gritos de la protagonista…), por una cosa u otra hay prácticamente unanimidad en lo buen drama que es… a ver cuando le hago post porque sobra decir que es uno de mis favoritos…

     Aquí sucede, a otro nivel, algo parecido, la enfermedad que sufre Seung Ho no es algo con lo que naciera ni que brotara sin ningún motivo, no, es algo psicológico que aparece cuando 15 años atrás, su perfecta y feliz infancia se rompe al morir sus padres y comprobar que se ha quedado solo y que los únicos allegados que le quedan y que supuestamente lo quieren y buscan lo mejor para él (menos mal que cuenta con el fiel empleado que lo cuida a la distancia desde entonces…) lo único que quieren es engañarlo para desposeerlo de su herencia, en ese momento su mente se cierra (de pronto su amigo de más o menos su edad, utilizado por su padre, se convierte en un monstruo para él… lo ve como tal…) y empieza a generar ese miedo a las personas, a desconfiar y a alejarse del mundo que lo rodea, así que lo único que se le ocurre es encerrarse él solo en su mansión donde se siente protegido, él y sus recuerdos felices con los que vive y que mantiene intactos… generando psicológicamente la tan mentana y grave «alergia a las personas» que lo ponen al borde de la muerte una y otra vez.

       ¡Es tan sumamente bueno ese ejemplo que usan en forma de metáfora del castillo de naipes! Una escena sin demasiada importancia que esconde tanto… Nuestro protagonista lleva 15 años construyendo y cuidando como un tesoro un castillo de cartas que comenzó con sus padres, pero ahora es taaan grande que ocupa gran parte de la habitación y tapa una ventana… cuando un día Jo Ji, sin querer, lo tira… ¡imaginaros como se pone Min Kyu!… al momento, sorprendido y calmado, se queda maravillado viendo lo bonito e iluminado que está ahora ese cuarto oscuro al quedar al descubierto dicha ventana, ni siquiera se había dado cuenta de que estaba ahí y mucho menos era consciente de lo sombrío que estaba todo… llevaba tantos años en esa oscuridad que al empezar a soltar amarras (a superarlo), empieza, valga la redundancia, a ver la luz y el enfado da paso a una especie de felicidad al notar esa paz y alegría que la luz le da…

       Y ese es el mensaje más importante que nos da esta historia, a todos nos han herido alguna vez, prácticamente todos hemos sido traicionados en alguna ocasión por alguien en quien confiábamos y muchas veces quedamos tan resentidos que empezamos a desconfiar de todo y todos, a vivir con nuestros recuerdos felices y a pensar en el tan famoso “Esto no me va a pasar de nuevo, ya no confiaré, ya no… ya no…”  A menudo pensamos que nosotros mismos somos los únicos que no nos traicionaremos nunca (en ocasiones ni esa afirmación es completamente cierta…) y nos creemos felices en nuestro propio mundo, un mundo seguro en el que “nadie nos va a hacer daño”… ¿pero somos realmente felices? ¿De verdad todas las personas que se crucen en nuestro camino nos van a herir? ¿De verdad merece la pena cerrarte a no ser feliz por un miedo permanente a algo que ni siquiera sabes si va a suceder? ¿No puede una sola persona merecer escapar de ese agujero y salir a la luz que nos negamos a ver o que por el contrario vemos de lejos, observamos con envidia desde la ventana como otros disfrutan de un bonito día bajo al sol mientras que nosotros nos mantenemos en casa por el simple miedo a que dicho sol nos termine quemando?? La verdadera finalidad de este drama es esta y de una forma nada moralizante te lo muestran una y otra vez de una excelente forma en cantidad de escenas y diálogos que tienen más profundidad de la que pueda parecer tras la bonita y entretenida historia de amor que nos ofrecen.

     Bueno amigos, pues hasta aquí, al final me ha salido más largo de lo que pensaba (¡qué raro! con las cosas que me gustan me es tan difícil resumir…) por enésima vez os digo que este es un drama recomendadísimo si buscas una bonita historia humana y de amor sin demasiadas pretensiones pero que sabrá tocarte el corazón una y otra vez.

¡Gracias por leerme!

Pilar

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